Cocemos el codillo en la olla a presión 25 minutos, junto con las 2 cebollas (enteras sin pelar), el laurel y un poco de sal, y reservamos.

Con las cebollas cocidas, las pelamos, las troceamos y las pasamos por la batidora, para preparar una crema. Para que no quede espeso, añadimos un poco de agua de la cocción del codillo, hasta que quede cremosa. Y la entendemos en la bandeja del horno.

Precalentamos el horno (arriba y abajo) a 180, y cuando esté listo metemos la bandeja con los codillos, que los dejaremos un total de 1 hora y 15 minutos.

A los 10 minutos, abrimos el horno y echamos la mitad del caldo que hemos batido por encima y dejamos que siga asando.

A los 35 minutos, sacamos la fuente, damos la vuelta a los codillos y regamos por encima con el resto del caldo. Y dejamos que se termine de cocinar hasta que cumpla el tiempo previsto. Seria conveniente vigilar que no se quede demasiado seca la salsa, en cuyo caso añadiríamos un poquito de agua.