Desmigamos el bacalao ya desalado. Reservar

Lavar pelar y cortar finamente la cebolla. Repetir lo mismo con las patatas y hacerlas en tiritas finas.

En una sartén con aceite freír las patatas hasta que doren, sacar y escurrir el aceite sobre papel.

Mientras en otra sartén calentamos un chorrito de aceite de oliva, ponemos la cebolla y a fuego bajo dejamos que poche sin que coja color. Cuando esté ya transparente, añadimos las migas del bacalao y mezclamos.

Dejamos cocinar hasta que el pescado cambie su color (que ya no se vea transparente). Añadimos a continuación encima las patatas ya fritas y volvemos a mezclar de abajo hacia arriba.

En un bol aparte, batimos los huevos con un pellizco de sal y pimienta. No pasarse de sal, ya que el bacalao ya le aporta sabor.

Regamos con ellos la mezcla anterior, bajamos el fuego a medio (yo en inducción al 6) y lo vamos removiendo con una espátula o cuchara de madera hasta formar un revuelto. Dejar cuajar removiendo despacio sin que quede demasiado seco.

Antes de sacarlo del fuego, rectificamos de sal si lo deseamos

Cortamos en trocitos pequeños el perejil fresco. Servimos el bacalao y se lo ponemos por encima.

Terminamos coronandolo con las aceitunas negras sin hueso. Se recomienda comer recién hecho.

Servir y disfrutar