Empezamos limpiando nuestro salmón, quitándole la piel y las espinas si las tuviese.
Una vez lo tengamos bien limpio lo trocearemos muy bien con el cuchillo hasta dejarlo bien chiquito o como más os guste, todo dependerá de si os gusta encontraros los trocitos.

Cuando las tengamos solo nos queda ponerlas en nuestro panecillos con lo que más nos guste acompañarlas, a la mía le he echado una mayonesa para hamburguesa que esta muy buena, una loncha de queso, tomate y cebolla que previamente había caramelizado en una sartén.

Para la guarnición de patatas, podéis cortarlas sazonarlas y freír, comprar patatas congeladas que algunas están muy buenas y freír o en mi caso hacerlas en el microondas que también están muy buenas y son mucho más sanas que fritas.

Para hacerlas en el microondas, solo tenéis que poner la patatas en un bol de cristal o cerámica y taparlas con plástico transparente, las meteremos en el microondas a máxima potencia durante 4 minutos o hasta que pinchemos el cuchillo con facilidad en la patata.
Seguidamente la pelamos, cortamos en trozos y sazonamos, yo les he echado sal, pimienta, perejil y pimentón dulce.
Solo nos queda saltearlas un poco en nuestra sartén para que queden bien doraditas.

NOTA: si las hamburguesas las queréis muy muy picadas, solo tenéis que pasar el salmón por la picadora y os quedarán como las que compramos en los supermercados o en carniceros.
Yo las pico con el cuchillo porque me gusta encontrarme los los trocitos.
Los condimentos también los podéis cambiar y añadirle o quitarle según vuestro gusto, (que no se diga que no innovamos).
A muchas personas le gusta el salmón con el eneldo, a mi no me gusta nada sabor que queda, lo prefiero echarle perejil.