Cortar las cebollas en finos cubos, picar los ajos, las aceitunas, colocar en un bowl apto para microondas, añadir el azúcar y el aceite y llevar al microondas tapado por 2 minutos, varias veces, a intervalos de 2 minutos, hasta que se vean tiernas las cebollas, luego retirar y condimentar a gusto, incorporar el queso crema, el queso rallado y reservar hasta que se enfríe.

Preparar la esponja colocando en un bowl la levadura, azúcar, harina y la leche tibia, mezclar y revolver para integrar y no queden grumos, tapar y dejar activar la levadura 20 minutos.

En un bowl grande colocar la harina, la sal, aceite, la levadura activada, incorporar de a poco la leche tibia, mezclar con cucharada de madera y añadir las cebollas y aceitunas reservadas.

Integrar bien con las manos y como resultará una masa pegajosa y húmeda pasar a amasar sobre mesada enharinada, trabajarla con energía, darle unos golpes tiràndola sobre la mesada varias veces, incorporando de a poco más harina hasta formar un bollo elástico.

Es muy importante el paso del amasado para que resulte un pan esponjoso y bien distribuido. Dejar reposar para que duplique su volumen 1 a 2 horas, tapado con un film o repasador.

Transcurrido el tiempo de leudado, tomar porciones darles forma bollando y colocar sobre placas engrasadas o pinceladas con aceite, un tanto separados, dejar descansar y leudar tapados con film o repasador en lugar reparado de corrientes de aire.

Llevar a horno precalentado a temperatura media 220° unos 15 minutos aproximadamente, cuando se vean dorados en su base y apenas dorados por arriba. Antes de llevarlos al horno los pinté con una mezcla de leche, mayonesa y ketchup, que le dará mejor color, también podría ser con huevo batido.