Batimos la mantequilla con unas varillas eléctricas a velocidad alta durante 4 minutos, hasta que presente un aspecto blanquecino.

Añadimos el azúcar y seguimos batiendo a velocidad alta un par de minutos más.

Bajamos la velocidad y añadimos los huevos, uno a uno, batiendo hasta que se integren.

Añadimos el ron y mezclamos hasta que se integre.

Tamizamos la harina junto con la levadura y batimos hasta obtener una masa uniforme.

Troceamos las galletas Oreo con las manos (trozos gruesecitos) y añadimos a la masa anterior, mezclando con una lengua pastelera mediante movimientos envolventes, para que las galletas troceadas se repartan por toda la masa.

Vertemos la masa en un molde alargado engrasado y forrado con papel vegetal para facilitar el posterior desmoldado.

Metemos al horno precalentado a 180 grados y horneamos a esta temperatura hasta que al pinchar el pastel con un palito veamos que sale limpio, unos 40 - 45 minutos.

Retiramos del horno, dejamos que se temple durante 10 minutos dentro de un molde y luego desmoldamos sobre un plato de presentación.