Cómo elegir un melón de un montón
Lo prometido es deuda. Mi suegra me enseñó la manera de elegir sandías y melones de entre todos los que te ofertan en el mercado o en el súper.

El problema es que en principio todos se parecen.
Pero atendiendo a los consejos de la yaya Teresa, basados en su larga experiencia adquirida durante toda su vida desde pequeña a cargo de la masia familiar y que me fue explicando durante los años en que vivimos juntos, desde entonces todas las sandías y melones piel de sapo que he comprado me han salido muy buenos.
En concreto para los melones (ya que en el caso de las sandías ya explique cómo elegir la mejor del montón en un truco anterior) hay que buscar el mejor melón atendiendo a tres características:
1.- los que tengan las arrugás (o estrías) que vayan de lado a lado, además
2.- que tengan las manchas verde oscuro que vayan también de lado a lado, y por último además
3.- que las puntas (la parte del rabo y su opuesta) estén ligeramente blandas
Me imagino que otras personas (profesionales o no) tendrán sus propios métodos. Yo aquí os dejo el de mi familia, que como os digo, al igual que como el de la sandía, a mi siempre me funciona y siempre me ayuda a recordar la importancia en primera persona del saber popular.
Espero que estos trucos os ayuden en la búsqueda de lo mejor del montón.



