Lo batiremos con unas varillas hasta que nos quede espumoso y adquieran un color casi blanco.

Le añadiremos el ron negro y lo batiremos a mano para que quede bien mezclado.

La nata para montar tiene que tener el 35% de materia grasa como mínimo y antes de batirla la hemos dejado en el congelador durante unos 10 minutos.

Batiremos la nata con las varillas, tiene que quedar un poco espesa, pero sin llegar a estar montada del todo.

Incorporamos la nata al bol que teníamos con la mezcla preparada y lo integraremos con movimientos envolventes, procurando que no se baje.

Pasado este tiempo ya estarán listos para comer los biscuits.

Antes de servirlos, es conveniente dejarlos un poco de tiempo fuera del congelador para que queden más cremosos.

Os aconsejo que veáis el vídeo para una mejor comprensión de todo lo explicado.