Preparar la mezcla para hacer la salsa bechamel convertida en carbonara. En la licuadora agregar los ingredientes, licuar hasta disolver bien, rectificar sabor, reservar.

En un sartén, sellar la tocineta y en su grasita rehogar la cebolla picada, 1 cda. de pasta de ajo, en mi recetario y mezclar bien hasta transparentar la cebolla. Llevar al fuego la mezcla de leche hasta cuando adquiera cuerpo, se ponga espesita, y añadir la mezcla de cebollas y rectificar sabor.

Debe quedar en el punto de la fotografía. Reservar. Cocinar la pechuga de pollo con pizca de sal y pimienta negra, hasta cuando esté tierna, desmechar y reservar. También reservar el caldo de la cocción de la pechuga. Barnizar moldes personales de aluminio con aceite de oliva o un molde grande.

Añadir una primera capa de bechamel carbonara, seguida de una lámina de pasta para lasagna, otra capa de bechamel, una capa de pechuga y así sucesivamente...

Entre capa y capa, láminas de queso mozzarella o queso rallado hasta terminar con salsa carbonara- bechamel, queso mozzarella y abundante queso parmesano salpicado de orégano.

Precalentar el horno por 15 minutos, hornear los moldes por 25 minutos o hasta cuando el queso funda y gratine a 180 grados C y este debe ser su aspecto. Delicia total, muy rápido y para almorzar o cenar viene bien. Me encantan los corazones🧡❤️💕💜💞💚💝