Una vez libres de hanas se lavan bien y se cortan en cuartos. Y se colocan en una olla que quepa todo. Si hay que cortar más chico se hace. Tiene que entrar todo en una sola olla.

Echar sobre las tunas la taza de agua y cocinar a fuego medio, procurando de revolver a cada rato y aplastando las tunas para que suelten su jugo.

Cuando todo se redujo a menos de la mitad y se desintegró toda la tuna, solo se ven las semillas. Pasar todo por un colador fino, separando la pulpa de las semillas.

Una vez separado se coloca la pulpa en una olla nueva y se sigue cocinando hasta que se reduce un tercio.

Apagar el fuego y ponerlo en un recipiente de vidrio limpio y seco. Y listo para comer o untar en unas galletitas en la merienda o desayuno!😘