Para el caldo: Se pican los 3 cebollines, el ajo y el jengibre. Luego, agregar un chorrito de aceite en una olla profunda, calentar un poco y poner la pechuga cortada en dos. Dorar por ambos lados.

Cuando las pechugas cambien de color, añadir el ajo y el jengibre. Cocinar por unos 3 minutos a fuego alto y añadir el cebollín y los ajíes. Cocinar por 5 minutos más. Luego, poner un poco de sal, pimienta y la salsa de soya.

Mientras que se prepara el caldito, picar la zanahoria en tiras bien finas. Hervir agua y cocinar la zanahoria por 3 minutos. Luego, colar y poner bajo un chorro de agua fría para detener la cocción (hacer lo mismo con el diente de dragón) cortar los champiñones y saltear en un poco de mantequilla hasta que estén dorados. El cebollín, picarlo bien finito (picar la parte verde y la parte blanca por separado) Reservar todo.

Para los huevos, hervir agua en una olla. Cuando esté en ebullición poner los huevos y cocinarlos por 6 minutos exactos. Sacar y poner en un bowl de agua fría y hielo para detener la cocción. Esperar unos 5 minutos, pelar con mucho cuidado y reservar.

Pasada la hora y media, colar el caldo, y volver a poner el líquido sin las verduras en la olla. Sacar la pechuga y desmenuzarla bien. Cocinar por 5 minutos más y apagar el caldo.

Por último, hervir agua y cuando esté en ebullición, poner los noddles (yo usé 3 porciones) cocinar por 3 minutos, colar y enjuagar con agua fría para detener la cocción.

Ahora, a armar el plato: en un bowl hondo, poner pollo, algunas tiras de zanahoria y los noddles. Sobre los noodles, añadir unas láminas de champiñones y luego la sopa. Finalmente, agregar encima un poco de cebollín y diente de dragón. Partir el huevo por la mitad (cuidado, porque estará un poco líquido) y poner una mitad en cada plato.