Aquí os dejo con esta facilísima receta que a mi pareja y a mi sobrino les encanta. Es una receta que suelo hacer cuando hace mucho frío o no sé qué hacer para cenar y siempre triunfa. Espero os guste.

Para comenzar, cortamos la cebolla y el pollo a taquitos pequeñitos, al igual que tenemos el jamón.

En una cacerola, añadimos el aceite y cuando esté caliente, sofreímos la cebolla, el jamón y el pollo a fuego lento, de forma que suelta el jugo pero no sé quema.

Cuando esté ya sofrito (que veamos que ya el pollo no está crudo); añadimos el agua y la sal hasta que hierva.

Cuando el agua esté hirviendo, añadimos el huevo picadito y los fideos y dejamos cocer hasta que estén en su punto y ¡Listo!