Empezamos preparando el pesto, en mi caso lo hice de nueces, pero podéis usar almendras, piñones, anacardos, cacahuetes... En el vaso de la batidora echamos el ajo pelado y sin germen, las nueces, la albahaca, 1 pizca de sal y un chorrito de aceite (unos 100 ml) y trituramos bien.

Agregamos el queso, os pongo la foto del que yo usé, y trituramos muy bien para que no nos queden grumos. Echamos la mezcla en un bol y reservamos a temperatura ambiente.

Vamos con el solomillo. Ponemos una sartén amplia al fuego con un chorrito de aceite y cuando esté caliente echamos el solomillo de cerdo, lo doramos a fuego medio-alto un par de minutos por cada lado, no queremos que se haga, solo que se dore por fuera.

Cuando tengamos el solomillo dorado por todas sus caras, vertemos la nata y cocinamos a fuego medio-lento 20 minutos, dando la vuelta al solomillo cada 5 minutos. Posteriormente agregamos 4 cucharadas de pesto, removemos y cocinamos a fuego lento 10 minutos, volteando el solomillo cada 5 minutos.

Vamos con las patatas sauté, para ello agrupamos los ingredientes. Pelamos y ponemos en un cazo con agua las patatas, cuando rompa a hervir agregamos la cucharadita de sal y dejamos cocer 10-15 minutos a fuego medio. Transcurrido el tiempo las sacamos del agua y las secamos con papel de cocina.

Ponemos una sartén al fuego con la mantequilla y dejamos que se derrita. Mientras cortamos las patatas en gajos. Cuando la mantequilla esté derretida agregamos las patatas y salteamos hasta que se doren.

Ya sólo queda emplatar. Cortamos en solomillo en rodajas, colocamos un par de rodajas en el plato, regamos con la salsa de nata y pesto y lo acompañamos con las patatas sauté. Buen provecho!!