Mientras se cuecen los ingredientes, hay que quitarles la cáscara a los camarones secos, (yo ya los compro sin cabeza, entonces solo es descascarar), quitar la colita y reservar por separado tanto los camarones como las cáscaras.

Mientras tanto, retiramos el agua de todo lo que ya hemos cocido.

Una vez que el "caldo" de camarón esté listo, colar y en el mismo caldo hay que disolver el mole. (Yo prefiero el mole en polvo porque vas midiendo la cantidad de agua o caldo que le pones y se hacen menos grumos que con el mole de pasta, yo compro este mole en polvo, con camarón en polvo añadido, en el mercado local de mi colonia). Una vez disuelto el mole, dejar hervir a fuego medio durante 15 minutos, revolviendo ocasionalmente para que no se pegue el mole en el fondo.

Si el mole se espesa mucho, puedes agregar agua, a discreción tuya, solo asegúrate de que no quede ni muy salado por el caldo de camarón, ni muy aguado por el agua extra que le vayas a poner.

Posteriormente agrega los nopales, los camarones cocidos (NO las cáscaras), y hasta el final agregas las papitas, moviendo constantemente para lograr un guiso uniforme.

Una vez que se cocinó el mole, agrega primero los romeritos y mueve el mole para que se impregnen.

¿Se te olvidó quitarles la cáscara a los camarones y así los cociste? No pasa nada, créeme, me ha tocado, lo único que hay que hacer es cocer muy bien los camarones para que la cáscara quede lo más suave posible, le quitas las patitas y la colita, y los agregas al guiso, no es lo ideal pero aún puedes salvar el platillo.

Para finalizar y antes de servir, se colocan tortitas de camarón, que se hacen con claras de huevo a punto de turrón, se agregan las yemas en forma envolvente, y se agrega polvo de pulpa de camarón, a discreción tuya, ya no saque foto de estas porque mi mami se comprometió a hacerlas en su casa.

El mole siempre sabe mejor si lo haces un día antes, si no tienes tiempo, como en mi caso, por lo menos asegúrate de que "repose" unas tres horas antes de servirse.