Para la salsa blanca: en una cacerola poner la manteca a derretir; agregar la harina y mezclar con cuchara de madera uno o dos minutos para que se cocine bien y después no tenga gusto a harina cruda... salpimentar y empezar a incorporar de a poco la leche, mezclando cada vez hasta integrar. Cuando se haya agregado la mitad de la leche, se tendrá una consistencia espesa (como en la segunda foto): en este punto separar en un bowl la mitad, que se usará para el relleno.

Al resto volver al fuego y seguir agregando la leche restante hasta conseguir la consistencia de la salsa. Retirar del fuego y corregir sabor con nuez moscada y pimienta.... reservar.

Para el relleno, en una sartén con un poquito de aceite trasparentar la cebolla y el ajo picados, con una pizca de sal. Agregar el choclo, la espinaca picada y el pollo (hervido previamente en un buen caldo con muchas verduras que después se toma como una rica sopa) cortado en cubitos. Salpimentar. Agregar toda esta mezcla al bowl en que reservamos la salsa blanca espesa, mezclar y corregir sazón... reservar.

Acomodar los canelones en una fuente para el horno, con una par de cucharadas de la salsa blanca en el fondo. Poner arriba el resto de la salsa blanca, la salsita de tomate y al horno fuerte unos 20 minutos. 5 minutos antes de retirarlos, poner un poco de queso rallado y gratinar... Buen provecho!!!