Ponemos al fuego una sartén con 4 cucharadas de aceite y dejamos se caliente.

Secamos bien las alitas y les ponemos la sal.

Si el aceite está caliente, las echamos a la sartén, bajamos un poco la temperatura y dejamos se vayan haciendo lentamente dándoles vuelta de vez en cuando.

Cuando veamos están doraditas y casi hechas, picamos los dientes de ajo finitos y se lo echamos por encima para que se vayan haciendo un poco (sin dejarlos quemar) y estarán listas para COMER.