Pelar las patatas y cortarlas a láminas finas. Empezar a freírlas en una sartén con aceite. 35-45 minutos a fuego bajo desde el principio.

Reservar las patatas en un bol. Freír/pochar la cebolla y los pimientos que previamente hemos cortado en brunoise.

Una vez pochados, reservar la cebolla y los pimientos en el mismo bol que las patatas. Allí, tirar los huevos y mezclar/batir todo. Salar y poner esta mezcla en una sartén (usa una que no se enganche).

Cuando cuaje por el lado de abajo, girar con un plato. Hacer el otro lado y listos! Servir y disfrutar!