Bandeja con papel de hornear. Moldes de galletas (en mi caso cuadrado y redondo)

En un bol ponemos la mantequilla, el huevo, el orégano y mezclar, el queso parmesano y seguir mezclando. La maicena mezclar bien

Añadir la nata o crema de leche, mezclar, la sal, mezclar muy bien. Vamos a ir añadiendo harina de poca en poca cantidad.

Cuando llevemos incorporada más o menos la 1/2 de la harina, añadir la levadura, mezclar, incorporar el resto de la harina, amasaremos con las manos, nos tiene que quedar una masa compacta y suave (para comprobar que la masa está bien hecha tenemos que coger una porción de masa, hacer una bola, aplastarla con la mano y no se puede separar por el contorno, si ven que se separa, tendrán que añadir más nata, hasta que al aplastarla quede totalmente redonda)

Hacer una bola y tapar con film transparente, dejarla reposar en el frigorífico 15’

Poner un poco de harina en la mesa de trabajo, hacer una bola con la masa, ponerla sobre la harina, coger el cortador y ponerlo encima de la bola. Precalentamos el horno a 180 grados calor arriba y abajo.

El resultado es estupendo!

Ponemos todas las galletas en la bandeja para hornear

Meter en el horno durante 20’ hasta que estén doradas.pasado el tiempo este es su aspecto (el olor que tenemos en la cocina es maravilloso!) Sacar del horno y dejar enfriar 10’ antes de ponerlas sobre rejilla.

Poner sobre rejilla.

Fantásticas!

El resultado es tremendo!