En primer lugar cortamos el calabacín en lonchas largas y finas. No es fácil (a mi se me han roto un par) pero com paciencia se consigue!💪

A continuación mezclamos el pan rallado, el orégano, el ajo granulado, la cebolla en polvo y la sal, y removemos todo bien. Os adelanto que va a sobrar bastante, pero os he puesto estas medidas porque son las que yo he puesto, podéis reducirlas de forma proporcional. De todas formas el aceite no va a ensuciar casi el pan rallado (no como si fuera un rebozado con huevo) así que podéis guardar el que os sobre, que es lo que he hecho yo😊

Por otra parte mezclamos el aceite con el pimentón dulce y mezclamos bien.

Preparamos el calabacín. En primer lugar lo pintamos con un pincel de cocina de aceite (así no absorverá tanto como si tiráramos un chorro encima) por ambos lados.

A continuación lo pasamos por el pan rallado, también por ambos lados, y lo colocamos en una bandeja de horno.

Repetimos estos pasos con todos los trozos de calabacín y los introducimos en el horno.

Cuando ya está hecho, lo sacamos del horno y dejamos que repose, para que no esté tan caliente.

En este punto preparamos el relleno de los rollitos. Yo he utilizado media loncha de pavo por rollito. En cuanto a los quesos, lo que había por la nevera😂 2 trocitos de Camembert, 4 de Queso Curado y 2 lonchas de Queso Tierno. Vosotros podéis hacer como yo, o utilizar lo que tengáis a mano.

Extendemos el calabacín en la tabla, sobre él media loncha de pavo y un trocito de queso. Envolvemos empezando desde la parte del queso.

Clavamos uno o dos palillos de forma que se sujete, y los vamos pasando a la bandeja de horno de nuevo.

Cuando los tengáis todos, los repartimos por la bandeja y la volvemos a poner en el horno, a 190°C durante 10 minutos.

Con el queso derretido y el sabor de todas las especias... Estaban buenísimos! 😋