Ponemos en una cazuela la leche de coco a fuego medio junto con la leche, cuando la leche llegue a 80 grados echamos el Agar agar, si no tenéis termómetro de cocina lo echais justo antes de que hierva.

Removemos hasta que se disuelva el Agar agar con una lengua de silicona, añadimos la stevia o panela o simplemente si no queréis no le echeis nada,volvemos a remover, apartar del fuego y esperar a que la temperatura llegue a 40 grados, si no tenéis termómetro a que esté tibia.

Cuando la leche llegue a la temperatura de 40 grados echamos el yogur de coco(o en su defecto los probióticos 2 cápsulas, abrís y echáis lo de dentro) y la leche en polvo(que para los intolerantes no pasa nada es solo para coger consistencia), si le ponéis coco rallado ahora es el momento, cogemos la batidora y batimos bien hasta su completa disolución.

Repartir la mezcla en los vasos de la yogurtera e introducirlos en ella tapamos con la tapadera y programamos entre 7 y 8 horas según la temperatura de la cocina tenéis que ir comprobando que esté cuajado si no dejáis un poquito más incluso a veces estaban antes), después introducimos en la nevera mínimo 6 horas. Este postre no queda tan consistente como el yogur normal si lo queréis más espeso lo poneis durante 2 horas en un colador de tela y lo hacéis más cremosos.