Separar las claras de las yemas, en dos bols. Las claras baterlas a nieve con la posca de sal. Reservar.

En el otro bol donde tiene las yemas (si tenemos una sola batidora, enjuagar y secar bien los batidores antes de volver a usar). Comenzar a bair las yemas agregando el azúcar en forma de lluvia, batir hasta que queden bien palidas y cremosas, agergar el aceite en forma de hilo, y la vainilla.

Ahora el turno de la harina ya tamizada con el polvo de hornear y a esta la iremos agregando en 3 veces intercalando con el agua tibia. Batimos en todo momento mientras agregamos estos dos ingredientes a velocidad baja o media.
Una vez que ya están integrados, batimos a velocidad máxima hasta lograr una mezcla uniforme. Retiramos el batidor.

Antes de desmoldar pasar el cuchillo todo alrededor, para asegurarnos que no se haya pegado al molde. Cortar al medio en dos capas parejas, humedecer con el vino Oporto o el almíbar (cuidado porque absorve mucho por esponjosa), espandir la crema y desparramar las cerezas cortadas. Colocar la otra capa y decorar a gusto, yo teñí la crema con un poco de colorante vegetal rojo y adorné con cerezas o guindas frescas.

Hago la aclaración que esta torta se hace en un molde especial tubo por eso su nombre (yo no lo tengo, pero no quise dejar de hacerla).
Dejo la receta del Pan Dulce agasajado por si lo quieren visitar.😍😍