Separar las yemas de las claras. Las yemas, ponerlas directamente sobre el arroz. Las claras las reservamos en otro bol.
Mezclar bien las yemas con el arroz hasta que todos los granos se hay cubierto de yema.
Reservar.

Saltear los ajos apenas.
Volcar el arroz con yema y mezclar bien.
Una vez que los granos estén separados, que se desprendan unos de otros con facilidad, agregar las claras tal como están. Salpimentar.

Servir y consumir de preferencia en el momento.