Lemon Curd: Preparar los ingredientes. En una bol apto para el baño María, mezclar los huevos con el azúcar y la vainilla, integrar y agregar el zumo de los limones. Mezclar y llevar a calentar al baño María. Remover continuamente hasta que espese, en ese momento, retirar y agregar la mantequilla y ralladura de limón. Integrar y listo!!

Crema Mascarpone: Como tenemos que montar la nata, lo primero será dejar que enfríe muy bien en el frigo o en el congelador un rato antes. Incluso el bol puedes enfriarlo. Todo esto para que se monte bien. Procedemos a montar la nata con varillas eléctricas y cuando estén casi listas agrega el azúcar y acaba de montar. Reservar en el frigorífico.

Colocamos la crema mascarpone en un bol y la batimos ligeramente para que nos sea más fácil integrarla con la nata. Sacamos la nata y con una espátula integramos la nata con la crema, haciendo movimientos envolventes. No dejéis ningún grumo!! Reservar en el frigo hasta el momento de montar el postre.

Preparar los vasitos: Tritura muy bien las galletas. Puedes ponerlas en un trapo y machacar o el mortero. Las colocamos en el fondo de los vasitos que hayamos elegido, no hace falta que sean muy grandes. A continuación, he agregado una capa muy fina de chocolate negro deshecho, pero es opcional. Además, después de refrigerar el postre este chocolate se endureció, así que si decides ponerle tenlo en cuenta. (Igual a algunos ese toque crujiente les encantó).

A continuación, espera a que enfríe el chocolate un poco, si has decidido ponerle. Encima, pondremos unas cucharadas de la crema de mascarpone y para finalizar nuestro fabuloso lemon curd. Las cantidades son un poco al gusto, pero mejor menos que más. Refrigerar hasta servir. Espero que os guste!!!!