Receta que encontré en una página de Instagram.

Quizá sea por deformación profesional, pero hay que reconocer que hay expresiones matemáticas muy bonitas ( y no sólo porque lo diga yo). La bella ecuación de Dirac, que describe las partículas como electrones cuando viajan casi a la velocidad de la luz; la fórmula de Riemann que permite calcular los números primos por debajo de un número dado; el irracional número π y su relación con la fórmula de la circunferencia del círculo; la ecuación de Euler-Lagrange con la que se puede analizar prácticamente todo; la ecuación de Yang-Baxter (aunque parezca más bien el dibujo de un niño); la preciosa identidad de Euler que combina cinco de los números más importantes de las matemáticas; la ecuación del campo de Einstein o una simple progresión aritmética… preciosa, simplemente por su sencillez de ser una secuencia de números separados por la misma cantidad… Pero he de reconocer abiertamente, que he llegado a la inevitable conclusión de que la más bonita es la ecuación de la vida (y seguramente también la más sencilla) que divide en dos la suma de lo que cada uno de nosotros hace y, le suma la otra mitad —la más importante — que es la compañía con quién estás, mientras lo haces.(*Esta receta fue uno de los platos de esta Nochebuena)#ChristmasEvedinner

Una forma distinta de comer unos muffins salados, sanos, bajos en grasa y en carbohidratos. Con más cantidad en cada uno y más levadura quedarán más altos y con mayor apariencia de Magdalena.

Esta receta surgió porque quería sorprender a mi marido con algo salado para desayunar y vi un video en Internet y lo probé. Es una de las variedades que preparo tanto como aperitivo si viene visita como para un desayuno o una cena rápida.

Una cena fácil, rápida y muy saludable

#DelantalCookpad2025¿Muffins de mejillones? ¡Sí, y son una bomba nutricional!Como nutricionista, siempre busco formas creativas de incorporar alimentos ricos en nutrientes a preparaciones prácticas y deliciosas. Estos muffins salados con mejillones son un excelente ejemplo de cómo combinar sabor y salud.Los mejillones son una fuente natural de proteínas de alta calidad, ricos en hierro, vitamina B12 y omega-3, nutrientes esenciales para la energía, el sistema nervioso y la salud cardiovascular. Además, tienen un bajo contenido en grasa y son sostenibles desde el punto de vista ambiental.Perfectos para llevar al trabajo, para una cena ligera o incluso como snack post-entreno.

Puedes ver la vídeo-receta aquí: https://www.youtube.com/watch?v=MssNXb0p0VI

¿Qué os parece una receta fácil fácil pero diferente y resultona para estas navidades? #sauraycookpad , si quieres sorprender a tus invitados ésta es tu receta, y encima saludable ¿qué más se le puede pedir?Se puede preparar con otros muchos ingredientes de tu elección: lacón y queso, gambitas y puerro, calabacín y setas... imaginación al poder.

Los muffins salados tienen cada vez más adept@s, y no es de extrañar: Son tan versátiles, sencillos y están tan ricos que, la mayoría de veces, basta con echar mano de restos de verduras y de algunos ingredientes básicos más para preparar unos bocados salados estupendos.Esta vez los he preparado con zanahoria rallada, cebolla y queso, y no han quedado ni las migas.¡Espero que os gusten!

Truquito: Si cuando mezclas los huevos, le añades un poco de nata de cocinar. Aún te quedarán más ricos 😋

Hoy vamos a hacer unos Muffin salados muy esponjosos, rápidos y sencillos de hacer, con un resultado estupendo!

Una de las ventajas del método Baby Led Weaning (BLW) de alimentación complementaria para bebés, es que cocinamos lo mismo para todos los miembros de la familia. Por supuesto con las debidas adaptaciones al bebé, lo cual puede resultar muy sencillo en ciertos casos. En esta receta muestro paso a paso como hacer unos pastelitos o muffin en los cuales aprovecho a meter una verdura que mi bebé de momento no come muy bien sola (brócoli); así como un ingrediente que probará por primera vez, las gambas. He cocinado a la vez el plato de los adultos y el suyo, adaptando el suyo en moldes de magdalena para que tenga un tamaño adecuado para él; y quitando los ingredientes que de momento no puede comer (la sal, el queso, y las especias que las podría comer pero no las he querido añadir esta vez).