La costra la hice con pan rallado casero - en casa intentamos no tirar nada ( al estilo #LoCocinoNolotiro ), así que cuando una barra de pan no se consume y se hace dura, la corto en trozos con un cuchillo afilado y pongo los trozos en el robot y hago zas varias veces. Se puede guardar en un recipiente hermético durante varias semanas y utilizar para rebozados, para hacer albóndigas, para espesar sopas. Se pueden tostar en la bandeja del horno y luego echar sobre un bol de sopa de cebolla o una crema de verduras y también se pueden usar como una costra de un pastel de pescado o carne o, en este caso de verduras. A veces pico unas hierbas y las agrego al pan rallado, pero este vez las mezclé con un poco de aceite de oliva, queso parmesano rallado y unas pipas de calabaza. Un plato delicioso que tomamos con un poco de ensalada verde.