Mise en place.

Calentar agua en una olla grande, cuando hierva apagar y poner encima el bol con el queso crema y la mantequilla. Batir muy bien hasta disolver.

Añadir las yemas, el azúcar glass, la leche batiendo muy bien entre cada adicción.

Agregar la sal y la ralladura de limón, terminar de mezclar y retirar el bol de la olla caliente, dejar enfriar.

Tamizar las harinas.

Montar las claras con el cremor tartaro, cuando empiece a espumar.

Añadir el azúcar normal poco a poco y continuamente.

Hasta que haga pico blando!

Agregar las harinas a la mezcla de queso.

Ahora agregar las claras suavemente en movimientos envolventes para que no pierdan el aire.

Poner la mezcla en el molde y llevarlo al baño María sobre un trapo con agua caliente al horno precalentado a 200 grados.

Poner en la parte más baja del horno inicialmente por 18 minutos, bajar a 160 grados y cocer 15 minutos más, ahora apagar el horno y con la puerta entreabierta dejar por media hora más, abrir por completo la puerta del horno y dejar enfriar por completo.

Este es el maravillosos aspecto que tendrá nuestro Cheesecake Japonés!

Desmoldar y dejar una hora en la nevera antes de decorar.

Para la decoración he cubierto las fresas con chocolate de cobertura roja, he triturado los pistachos y en el centro he puesto azúcar glass.

Aquí podéis ver el corte del cheesecake, es esponjoso muy suave con una textura que nos recuerda el algodón... es realmente inolvidable!!!

#retoalfabetodulce Es una participación que siempre me sorprende con una combinación de sabores y aromas deliciosos!