Vamos a montar la nata y trufa, para que la nata monte fácilmente es mejor que este muy fría, ponemos la nata en un recipiente amplio junto con el azúcar glass, removemos un poco hasta integrar y con una máquina de varillas le damos caña hasta que quede totalmente montada, para la trufa haremos lo mismo solo que en este caso añadiremos azúcar y el cacao en polvo, integramos y montamos igualmente con la máquina de varillas, reservaremos en la nevera ambas preparaciones.

Ahora es el turno de el almíbar, en un cazo ponemos el agua junto con el azúcar y el licor de fresas, si no tienes licor de fresas puedes usar otro a tu gusto como uno de avellanas, almendras etc...
Ponemos al fuego hasta que hierva en ese momento retiramos del fuego y reservamos para más tarde.

Después limpiaremos y cortaremos en taquitos pequeños todas las fresas del relleno.

Para esta receta he usado unos bizcochos de 24 cm, son muy fáciles de encontrar ya listos en súper mercados, (yo los encontré en hipercor) pues con estos iremos montando la tarta, todos y cada uno de ellos tienen que empaparse un poco con el almíbar por ambas caras, así que primero le damos por una cara y al montar la tarta por la otra.

Empezaremos poniendo una capa de bizcocho, después la cubriremos con nata montada, sobre esta añadiremos las fresas picadas, a continuación haremos lo mismo pero esta vez pondremos la trufa junto las fresas, la siguiente capa será igual que la primera con bizcocho, nata y fresas por último taparemos con otra capa de bizcocho en total hemos usado 4 capas de bizcocho.

Es el turno de preparar la cobertura de la tarta, en un cazo pondremos la mermelada de fresas junto el agua, ponemos al fuego y removemos hasta que empiece a hervir, en ese momento añadiremos la gelatina neutra, y seguiremos removiendo fuera del fuego hasta disolver.

Ahora seleccionaremos unas fresas bonitas y hermosas y las repartiremos por la parte superior de la tarta junto con los arándanos, después pintaremos toda la fruta con la cobertura así tendrá un brillo muy apetecible y atractivo.

Por último con la nata restante taparemos la parte exterior de la tarta, con una manga pastelera y una boquilla rizada lo haremos muy rápidamente, si te ha sobrado trufa puedes hacer lo mismo y decorar a tu gusto, ya tienes la mejor tarta de esta época del año, disfrutala mucho!