Prepara todos los ingredientes y en un bol mezcla la harina con la levadura tamizada con el yogurt mezclado con la miel y la pizca generosa de sal. Lleva la mezcla a la mesa de trabajo y amasa hasta conseguir una textura elástica que se suelte de la mano y de la superficie de trabajo fácilmente. Déjala reposar media hora. En un vaso prensa el ajo y mézclalo con el resto de los ingredientes del relleno. Reserva.

Corta la masa en 12 porciones, estiralas con un rodillo pon media cucharadita de relleno en medio y cierra la masa como un saco alrededor.

Vuelve a estirar cada bolita con la ayuda del rodillo pinta un lado con aceite de oliva y en una sartén caliente a fuego medio fríelas 30 segundos por cada lado. Vas a ver como se van hinchando un poco, le pintas la otra cara con aceite y Le das la vuelta.

Todo listo para disfrutarlas solas, acompañadas de embutido o con una buena cucharada de nata agria y pepinillos picados.