Para preparar la masa comenzamos mezclando las dos harinas junto con el polvo de hornear en un bowl.

Incorporar el aceite y el agua, hasta formar una masa blanda y uniforme. No se tiene que pegar en los dedos. Tip: En caso de pasarnos de agua, podemos ir incorporando harina común hasta lograr el balance perfecto.

Cuando la cebolla transparente y la espinaca este pronta la retiramos del fuego y la colamos. La dejamos reposar para retirar todo el excedente de agua del relleno. Este paso es súper importante, porque si el relleno queda con mucha agua, puede pasar que la tarta se rompa al servirla.

Una vez que la mezcla quedó escurrida, colocar en un bowl e incorporar el huevo y los condimentos que desees (en mi caso le puse una pizca de sal y un poco de pimienta). Mezclar todo.

Colocar la masa estirada sobre una asadera previamente enharinada, y luego le sumamos el relleno. Llevar al horno a 180 grados hasta que la mezcla quede firme (aprox. 45 min).