Cremona de manteca con membrillo

Colocar la harina en forma de corona, espolvorear la pizca de sal y el azúcar alrededor. Desgranar la levadura en el centro junto al azúcar y un poco de harina. Incorporar agua tibia sobre la levadura y comenzar a tomar la masa. Agregar el resto de agua tibia de a poco para no pasarse. No amasar, solo unir y dejar descansar en un lugar cálido, tapada con un nailon y un repasador, hasta que duplique su volumen.

Estirar la masa en forma rectangular y dividirla en tres partes (marcar, no cortar). Distribuir la manteca pomada en la parte central y cubrir con los extremos superpuestos.

Estirar nuevamente la masa y formar un rectángulo más largo, marcar la mitad y doblar los extremos como se ve en la foto.

Cuando los extremos se juntan en la mitad del rectángulo, doblar como un libro. Quedan cuatro capas de masa.

Estirar la masa formando un largo rectángulo y colocar bastones de dulce en el medio. Si desean hacerlo prolijo, pueden recortar los lados del rectángulo y con la masa que sobra armar galletitas.

Cubrir el dulce y presionar un poco en el centro.

Cortar la masa sin llegar al dulce.

Enmantecar una pizzera (si tienen, usar papel manteca también enmantecado) y darle forma a la cremona uniendo los bordes. Pintar con huevo batido y espolvorear con azúcar.