Aceite en una sartén y pasar los filetes sin que estén del todo dorados, solo que no estén crudos.

En un cazo aparte o en la misma sartén (previamente reservar filetes en un plato), añadir queso roquefort, cuando esté más o menos fundido, añadir nata. Yo no pongo muy fuerte el fuego para que no se haga demasiado la salsa. Al gusto se va añadiendo o más nata o más queso, dependiendo de si os gusta más o menos fuerte la salsa.

Cuando esté lista, poner los filetes en la sartén con la salsa o si los habéis dejado y hecho la salsa en un cazo aparte, añadir salsa a la sartén.

Mezclar bien y dejar unos minutos para que se terminen de hacer bien los filetes y se impregne bien la salsa.

Se puede acompañar con una ensalada bien rica o unas patatas fritas. A disfrutar!!!