Macarrones con salchichas

Lo primero que hacemos es cortar las salchichas en trozos que nos permitan comerlos sin esfuerzo y el jamón en tacos pequeños.

Conviene que tengamos a mano las especias vamos a utilizar bastantes en éste plato.

Salteamos a fuego vivo las salchichas, una vez doradas las retiramos.

En el mismo aceite doramos el jamón.

Y también lo retiramos junto con las salchichas, el aceite que sueltan será interesante pues lo añadiremos al sofrito.

Preparamos los ingredientes para hacer el sofrito, muy importante !!!

En el mismo aceite que hemos dorado las salchichas y el jamón echamos el ajo y la cebolla y dejamos que se poche una vez salpimentada.

Cuando comience a tomar color echamos el pimiento y la zanahoria.

Mientras se hace, aprovechamos para rallar el queso que luego utilizaremos.

Pasados unos minutos del sofrito echamos los tomates secos potenciarán el sabor !!!, y añadimos también el aceite, damos un par de vueltas.

Añadimos el tomate que hemos rallado, rectificamos de sal y echamos el azúcar para reducir la acidez y la copa de vino que le dará un sabor de diez, complemento perfecto.

Añadimos el orégano y removemos, dejamos que se evapore el alcohol y el tomate pierda su agua, removemos de vez en cuando.

Cuando veamos que ha reducido el sofrito lo trituramos.

Hemos puesto una olla al calor para cocer la pasta según instrucciones del fabricante junto a la hoja de laurel, si queremos darle más sabor podemos añadir una pastilla de caldo de pollo o carne.

Reservamos el sofrito al calor y colamos la pasta una vez hecha, pasamos el primero a una cazuela y añadimos la pasta debemos remover rápido para que se mezcle y a la vez no pierda calor, una vez mezclados añadimos el queso y dejamos que con el calor residual se funda.

Espolvoreamos la albahaca y ya podemos ir repartiendo en los platos.