Comenzaremos cortando las zanahorias en láminas y luego en cortes diagonales para crear unos rombos. Cortaremos del mismo modo el pimiento. La cebolla la cortaremos en cuadrados y en láminas los champiñones, aunque también podéis comprarlos ya laminados naturales. Reservaremos la verdura hasta el momento de usarlas.

Troceamos las pechugas en cubos de tamaño mediano. En una sartén grande a fuego medio-alto, (si es tipo wok mucho mejor), añadiremos el aceite y cuando esté caliente, incorporaremos el pollo. Añadiremos sal al gusto y dejaremos que se dore ligeramente.

Para la salsa añadiremos en un cazo a fuego medio el caldo de pollo, el azúcar moreno, la salsa de soja y la maicena. Iremos removiendo constantemente hasta que espese y se vuelva brillante. Si tarda en espesar yo suelo subir el fuego a alto, espero unos segundos y bajo de nuevo a fuego medio, siempre removiendo.