En primer lugar, desojamos la remita de Romero y las hojas de salvia. A continuación, con un cuchillo lo picamos lo más fino posible.

A continuación, lavamos bien las patatas porque las vamos a hornear con su piel.

Seguidamente, cortamos las patatas en gajos gruesos y los colocamos en una fuente y los espolvoreamos con la media cucharadita de hierbas provenzales, uno se los dos dientes de ajos picado muy fino y espolvoreamos con sal fina Marina.

A continuación, le añadimos aceite de oliva virgen extra con una aceitera por encima de las patatas con generosidad y reservamos en el frigorífico.

Mientras tanto, cogemos los cuartos traseros de pollo y los limpiamos bien de plumas y grasas sobrantes.

A continuación, los cortamos en en dos trozos cada cuartos.

Seguidamente, los ponemos en un bol y le añadimos la mitad del Romero con la salvia que acabamos de picar, la media cucharita de sal granulada con hierbas aromáticas y chiles.

A continuación, le añadimos unos hilos de aceite de cúrcuma. El aceite de cúrcuma, es un aceite que hice hace siete años y no es más que aceite de girasol macerado con raíces de cúrcuma. Éste aceite se vende en farmacias y ese no es, hay que buscar en tiendas gourmet para uso en cocina pero es muy fácil de hacer..

A continuación, mezclamos bien con las manos masajeando para que se marine rápido.

Seguidamente, colocamos los trozos de pollo encima de las patatas bien colocadas y reservamos en el frigorífico de nuevo.

A continuación, cogemos un vaso batidos y le añadimos el perejil fresco picado, el brote de hinojo, el diente de ajo pelado y ligeramente picado, la cucharita de baharat y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra.

Seguidamente, metemos el brazo batidor y trituramos hasta que quede bien batido.

A continuación, sacamos la fuente del frigorífico y le añadimos la mezcla que acabamos de batir por encima de los trozos de pollo y sobre las patatas.

Con el horno ya precalentado a doscientos °C, metemos la fuente y dejamos hornear durante treinta minutos. Pasados los treinta minutos, reprogramamos el horno a 180°C, y dejamos que se doren durante unos veinte minutos siempre con el horno arriba y abajo y la fuente en el centro del horno.. este tiempo de horneado va a depender del peso y el grosor de los trozos de pollo y de las patatas.

Pasado ese tiempo, ya tenemos nuestro pollo y patatas horneados perfectamente y listo