Preparamos todos los ingredientes. Molde a usar, rectangular, 26 cm. de largo por 10 cm. de ancho por 7 cm. de alto, cortaremos un pliego de papel de hornear con las medidas de la base y de los dos laterales del molde. Pincelar la base y laterales del molde con mermelada, poner encima el pliego cortado y volver a poner mermelada encima del papel.

Pelar las manzanas enteras, sacar la parte central de las semillas, cortar en dos partes iguales, con una mandolina de cocina vamos a hacer rodajas (en mi caso de los tres números que tiene voy a usar el número dos). En un bol mezclamos la maicena y el azúcar, reservar.

Este es el grosor que deben tener. Precalentamos el horno a 180 grados calor arriba y abajo

Vamos a ir colocando rodajas en la base apoyando levemente una sobre otra, pondremos una primera capa y encima una segunda capa, cada vez que pongamos dos capas presionamos bien con las manos, espolvorear por todas las manzanas mezcla de maicena y azúcar, poner encima otras dos capas de rodajas de manzanas, presionar y luego cubrir con la mezcla de maicena, así haremos hasta llegar al borde del molde.

Meter en el horno, si ven que la superficie se pone muy dorada taparemos con papel de aluminio hasta que al meter una aguja de cocina en el pastel se clave muy suavemente. Pasado el tiempo este es su aspecto, sacar del horno y dejar enfriar por completo a temperatura ambiente. Tapar con film transparente y meterla en el frigorífico mínimo seis horas