Torta esponjosa deliciosa

Primero que nada, prenda su horno, enmantequillar y enharinar el molde. Separar con mucho cuidado las claras de las yemas de los 6 huevos.

Por un lado batir (manualmente o con batidora): las yemas con parte de la azúcar (no toda ya que la usaremos para las claras), hasta que quede un color amarillo pastel, agregar la vainilla, echamos la harina cernida de a poco (no de golpe) en forma de lluvia, de manera que va espesando el preparado le agregamos la leche de poco en poco, lo que pida la masa, alternamos con la harina y seguimos batiendo, este preparado tiene que quedar líquida pero un poco espesa, y echar el polvo de hornear. (reservar la preparación)

Por otro lado, batir las claras a punto nieve (recuerde lavar bien las varillas de la batidora y que el recipiente esté limpio) una vez suban las claras agregar lo que queda de azúcar batir bien, una vez tenga el punto nieve agregar con movimientos envolventes y de a poco a nuestra preparación anterior van a quedar partes blancas.

Verter el preparado en el molde que enmantequillamos, tratar de vaciarlo parejo ya que no podemos dar golpes para que nuestra masa no se baje, bajar la temperatura del horno a 180°c y meter nuestra elaboración durante 50 minutos aproximadamente.

Es importante que no abra el horno durante los primeros 35 minutos sino se puede bajar su preparación. Una vez esté lista su masa apague el horno y deje la masa dentro, una vez haya enfriado el horno desmoldar y rellenar el bizcochuelo. (esto sirve para que el cambio de temperatura no baje nuestro bizcochuelo)

Lo mejor es decorar la preparación al día siguiente, si no le da el tiempo no importa.

Decore:
Como usted desee, una opción es batir la crema de leche bien fría una vez que suba agregar el azúcar en lluvia, y así va a tener la crema de chantilly , cortar capas de la torta (puede que se deshaga ya que es una mezcla de merengue y bizcochuelo, pero no se preocupe que se arma nuevamente y se decora con crema, ni se va a notar.)

Se sabe si está en el punto nieve cuando movemos el recipiente cuidadosamente hacia un lado, lo volcamos con cuidado y si las claras están duritas y no caen al suelo es que está en su punto caso contrario seguir batiendo.