Me sobró crema pastelera de melocotón y con unos frutos secos y helado hice el Domingo, esta copa de helado que además de estar buenísima es muy refrescante. Los dátiles le dan dulzor y las nueces el toque crujiente.Para hacer la receta de crema de melocotón pinchar el enlace crema pastelera de melocotón (http://www.mis-recetas.org/recetas/show/53381-crema-pastelera-de-melocoton)

He preparado esta tulipa rellena con una crema de turrón de jijona (del que me habia sobrado de Navidades), dos bolas de helado, nata montada, kiwi, cerezas en almibar y un barquillo.

Aquí os dejo un postre muy sencillo y estupendo que preparé con parte de las maravillosas fresas que compré hace unos días.Se puede hacer con otras frutas como melocotones, moras, arándanos, etc.

Un postre tradicional en mi flia, anda a saber desde cuando viene

Simples y golosas tartitas de #chocolate .Se pueden decorar también con fruta fresca .

Para combatir el calor, nos apetecen postres frescos y naturales. Hoy he preparado este postre, que me ha gustado mucho. Se puede hacer con ciruelas que se nos hayan maduro mucho, aunque este no ha sido mi caso.La crema la he acompañado con una bola de helado de vainilla praline con nueces pecan, es bastante dulce y combina muy bien con las ciruelas, que aún estaban un poco ácidas. El helado de vainilla de toda la vida le va igual de bien.

Esta receta la hicimos con mi compañera Jessica en el encuentro Cookpad Uruguay! Es fácil y muy rica, anímense a hacerla! 😁

Unas tulipas rellenas de crema pastelera, que llevan encima un bola de helado de chocolate, cubriertas de nata montada y adornadas con chocolate liquido, una delicia, Gracias Elena.

Es uno de mis preferidos, se hace con las cerezas en kirsh y después se usa la receta básica del helado de crema, espero que les guste.

A mí, de pequeña —y, desgraciadamente, no tan pequeña— había muchísimas cosas que me daban vergüenza. Cosas como: correr para que el conductor del autobús se diese cuenta, y no se marchase sin nosotras, mentir a los vendedores que llamaban a casa ofreciendo enciclopedias diciéndoles que no sabíamos leer y, por supuesto, que alguien me saludara por la calle y no saber quién era, fuera quien fuera ese alguien. Ahora, no me da vergüenza casi nada de lo que hago, ni siquiera hablar en inglés en público —aunque me da rabia haber olvidado tanto de lo aprendido—.Por tanto, la vergüenza es algo que se te pasa con la edad, como: la piel tersa, la habilidad para dormir hasta las once de la mañana, la capacidad para correr con unos tacones de 18 centímetros o de confiar en tus rodillas y tobillos en cualquier circunstancia. Es decir: perder la vergüenza es una actualización de la manera en la que vivimos. Y esta update mejora mucho la vida, porque la vergüenza llevada al extremo: paraliza, bloquea e impide hacer muchas de las cosas para las que se está perfectamente capacitado.Por supuesto, lo de que vas a perderla es algo que no sabes y que, aunque te lo diga tu madre, crees no te pasará, que siempre vivirás sintiéndote menos, fuera de lugar o juzgada por los demás —que es otra cosa que aprendes: a nadie le importa lo que hagas o dejes de hacer—.Así que me declaro oficialmente: ¡Una sinvergüenza!(Sumamos esta receta a la temática: RevistaCookpad Junio).#RevistaCookpad

Helado casero y súper saludable con ingredientes fáciles . Está buenísimo, os animo a hacerlo en casa y vais a alucinar .