En una de las dos cucharadas de aceite, sofreír la cebolla cortada en tiras finitas. Como esta pizza se hace sin horno, hace falta dorar antes la cebolla. Una vez doradita, apagar el fuego, condimentar con orégano y pizca de sal.
Reservar.

En un bol colocar harina, sal y polvo de hornear. Mezclar un poco y hacer un huequito en el centro. Agregar la otra cucharada de aceite y el agua de a poco, ya que según la harina puede absorver más o menos. Mezclar bien. Una vez que la masa comienza a desprenderse del bol, bajar a mesada y amasar un poquito.

Enharinar mesada y palote ligeramente.
Estirar con palote dando forma redonda, de tamaño acorde a la sartén donde se va a cocinar.
Poner a calentar la sartén (si es antiadherente no hace falta agregar nada), y cuando está caliente poner el disco de masa. Tapar y cocinar al mínimo por 5 minutos.

Darla vuelta.
A los 5 minutos, agregar queso. Finalmente la cebolla reservada y cocinar por unos 10 a 12 minutos más.
Colocar algún topping de su gusto, tipo aceitunas.

Con los bordes de masa que me sobraron, corté unas crackers que cociné también en la sartén tapada.
"Cookpizzitas" 🥰