La espinaca está compuesta mayormente por agua. Contiene baja cantidad de grasas e hidratos de carbono pero es uno de los vegetales que más proteínas contiene. Es rica en fibras, especialmente los tallos,
es una excelente fuente natural de vitaminas y minerales (calcio, hierro, potasio, magnesio, manganeso y fósforo).
En cuanto al contenido de vitaminas, la espinaca es rica en vitamina A, C, E, K, vitaminas del grupo B ( B6, B2, B1) y ácido fólico (vitamina B9).
También contiene sustancias antioxidantes como los flavonoides y carotenoides (la luteína y la zeaxantina, neoxantina). También es una buena fuente de ácidos grasos Omega-3. Cocida pierde parte de los beneficios en vitaminas y mantiene los minerales. La mejor forma es hervirla en forma rápida (1 minuto). Dejar hervir el agua en un recipiente, agregar la espinaca, cocinar por 1 minuto sin tapar, retirar del fuego y colar. No hervir por largo tiempo ya que perderá gran parte de sus nutrientes.
La espinaca es rica en ácido oxálico, que al combinarse con minerales forma oxalatos que se depositan en forma de cristales en las articulaciones, produciendo daño a los tejidos. Afecta a quienes sufren de gota, artritis reumatoidea, artrosis, etc. También contribuyen a la formación de cálculos renales, no es recomendable en quienes han sufrido cólicos renales.
Los oxalatos disminuyen la absorción de calcio, por ello, para mejorar la absorción de calcio, se recomiendo hervirlas brevemente.