Primero, como siempre, la foto de los ingredientes

Prepararemos un cuenco con agua y las mojamos humedeciendo las manos y mojando las setas con las manos húmedas, porque se trata de que se le adhiera la harina para rebozar, porque nada va a llevar nada más harina, no vamos a echarle ni falso su huevo ni nada.
Después de esto, vamos rebozando todas poco a poco.
Y ahora vamos enharinando nuestras rabas.

Ponemos una sartén con abundante aceite a calentar y una vez que el aceite esté caliente vamos friendo nuestras rabas.
Cuando estén doraditos, los sacamos a un plato con papel absorbente y les espolvorearemos un poco más de sal porque, como os digo, esta seta es muy seca, muy carnosa, y no absorbe demasiado.

Como veis en la foto, he hecho unas con la típica forma de las rabas y otras, les he dado forma del calamar tradicional, para ello lo único que tenéis que hacer es cortar las setas en rodajitas y luego sacarles un circulito. Yo he utilizado el saca-bocados típico, para perforarlas por el centro, pero podéis usar un cuchillo pequeño para ello, y que tengan la forma del aro de calamar tradicional así que, a vuestro gusto.