Para comenzar tenemos que tener muy claro si las haremos con "gambas congeladas o frescas", si las hacemos con gambas congelas las sacaremos la noche de antes y las dejaremos sobre un escurridor con papel absorbente, al día siguiente las secaremos muy bien con papel absorbente antes de cocinarlas y las retiramos el intestino, si por el contrario son frescas las pelamos retirando cabeza, cuerpo y cola, le sacamos el intestino y reservamos

Lo segundo será ver si tenemos Vitro o Fuegos, si tienes Vitrocerámica yo te aconsejo hacerlas en sartén y luego servirlas en cazuelitas de barro que es lo que hice yo, si por el contrario tienes fuegos puedes poner las cazuelitas de barro así tal cual

Seguidamente y antes de que los ajos comiencen a dorarse, añadimos las gambas que deben estar muy escurridas y bien secas, incorporamos sal al gusto, subimos el fuego y las gambas estarán enseguida, en dos o tres minutos las tendremos, si nos apetece podemos echar justo antes de retirarlas del fuego unas gotitas de vino blanco o de fumet y las dejaremos 1 minuto más, pero os aseguro que así tal cual están ¡Espectaculares!

Servimos nuestras gambas al ajillo como toca, en sus cazuelitas de barro correspondientes