En la misma olla (olla tradicional, no a presión) donde vamos a hacer el guiso, echamos aceite (medio vaso), y sofreímos los dientes de ajo, las almendras y el pan. Reservamos

En un mortero echamos las almendras fritas, el pan frito (pude valer una tostada), el perejil picado, los dientes de ajo pelados y un poquito de sal y lo machacamos todo bien. Reservamos este majado

En la misma olla incorporamos el pollo troceado y lo sofreímos hasta que esté bien dorado. Apartamos los trozos. Incorporamos las albóndigas y la sofreímos. Las apartamos.

En el mismo aceite donde hemos dorado el pollo, sofreímos la cebolla, las verduras y el tomate.

Cuando esté bien sofrito, echamos el vino y el brandy y esperamos que se evapore. Volvemos a incorporar los trozos de pollo removemos bien y cubrimos de agua o caldo de pollo. En este punto incorporamos los guisantes y el colorante.

A media cocción incorporamos las albóndigas e incorporamos el majado que habíamos hecho con los ajos y las almendras.

Durante la cocción debemos ir comprobando su sabor y rectificar de sal si fuese necesario.

Pasados los 45 minutos incorporamos las patatas y dejamos cocer durante 20 minutos más. (Las patatas deben quedar en su punto)

Apagamos y servimos en los platos.