Ponemos en el vaso de la Thermomix, la leche con la levadura, y programamos 37ºC, velocidad 3 durante 2 minutos. Agregamos la harina, la sal, el azúcar, el aceite y los huevos. Programamos 5 minutos a velocidad espiga.
Hacemos una bola con la masa, tapamos con papel film y dejamos reposar hasta que doble de volumen.

Mientras en una sartén, con un poco de aceite, sofreímos la cebolla con el ajo. Cuando esté transparente, agregamos la carne y freímos unos minutos hasta que esté doradita. Salpimentamos y añadimos orégano. Dejamos enfriar, para que tenga más consistencia.

Cuando la masa haya levado vamos cogiendo porciones del mismo tamaño, formamos una bolita y después la aplastamos sobre la mano en forma ovalada.

Rellenamos con una cucharada del relleno y cerramos los extremos pellizcando la masa para sellarla bien. Le damos forma ovalada a cada bollito.

Precalentamos el horno a 200°C, mientras vuelven a levar ligeramente. Pincelamos con el huevo y espolvoreamos el sésamo. Horneamos unos 20 minutos (hasta que estén dorados).

Se pueden tomar calientes o templados. Acompañados de lechuga, son una perdición.