Comenzamos uniendo la leche tibia, nuestra levadura y azúcar rubia. Dejar reposar unos 10 minutos. Hasta ver aumentada la mezcla o se vea espumoso.

En un bol preparamos la harina ojalá dejando un espacio en el medio. Agregamos los huevos. Mantequilla derretida. La levadura ya fermentada y un toque de esencia de vainilla.

Debemos mezclar hasta conseguir una masa homogénea que no se nos pegue en las manos. Una vez lista la dejamos reposar en un bol aceitado por 60 minutos aproximadamente hasta que la masa aumente su volumen.

Para el relleno de nuestros rollitos. Mezclamos azúcar moreno, canela, mantequilla derretida y si gustas una cucharada de cacao para darle más sabor y color

La masa ya ha reposado lo suficiente así que manos a la obra! Espolvoreamos con harina la superficie en donde se va a estirar la masa (para que no se pegue). Se debe formar un rectángulo grande.

Una vez lista la masa. Cubrimos con nuestro relleno. Se enrolla desde tu cuerpo hacia adelante como un brazo de reina. Y procedemos a cortar nuestros rollitos. (Yo los hice 2 dedos de ancho)

Se hornean por 10 mintutos a 180°

Preparamos el glaseado. Batiendo el queso crema junto con la leche y azúcar flor sin dejar grumos