Para la masa, cremar la manteca con el azúcar más la ralladura, el huevo y la esencia (yo lo hice en una pocesadora todo pero pueden hacerlo con un batidor).

Hacer una corona con la harina tamizada y mezclada con el polvo de hornear y volcar el cremado en el centro.

Dividir en 2 partes (1/3 y 2/3) y envolver en film. Llevar a la heladera 1hr aprox.

Sacar la masa de la heladera, extenderla con la ayuda de un palote.

Tomar los 2/3 de masa estirada y forrar el molde de una tartera desmontable de 24cm, previamente enmantecada y enharinada, presionando bien con los dedos.

Para el relleno, en un bol mezclar los ingredientes. Primero mezclar la ricota junto con las yemas (separe las claras de las yemas así salen un poco más alta), el almidón y el azúcar.

Aparte mezclar las claras a punto nieve e integrar a la anterior preparación de forma envolvente.

Volcar la preparación del relleno sobre la masa base de la tarta.

Cubrir con el tercio restante

Cocer al horno medio por 40 min. Una vez salida del horno, dejar enfriar bien y decorar con el azúcar impalpable. No le pongan el azúcar impalpable en caliente porque se derrite.