Deliciosas empanadas tucumanas bolivianas de carne, esta es una deliciosa receta practica para poder servirla con las visitas o llevarla para un partido o actividad de los nenes, incluso para una reunión de colegio Esas empanadas tucumanas bolivianas de carne es fácil económica y mas que todo con ese sabor hogareño :)

Aprovechar las sobras y crear deliciosos platos, es parte de la magia de ser cocinero...!!!

Conveniente, rápida y riquísima.

Encontré esta divertida, fácil y deliciosa de hacer en el supermercado. Gracias a Maggi

Saludable y alimenticia, una almuerzo que siempre viene bien, acompañada con unas galletas de saltines, tendrás satisfecho el alma.

Muy rica combinación, para comer recién terminado, la papa en la salsa se espesa al enfriar y perdemos el cremor del recién hecho.#popurrí

Comida completa y saludable!

Esta creación tiene fundamentos peruanos, panameño e hindúes.

Todo se aprovecha en la cocina, días atrás cocine un pollo al horno con papas, donde las papas se cuecen en el sudor del pollo, las cebollas y el tomate. Entonces me sobró bastante, para tomarlos como materia prima de esta creación. Vas a darle un giro con el fuego de la estufa y las caricias del cuchillo. Trozaremos la pechuga en pequeños cubos, al igual las papas asadas, y aderezaremos con el fondo del asado.

Esta versión es muy personal, en cuanto a la técnica y los ingredientes, con un resultado sobresaliente.

Cena para noches frías.

Con las lentejas que cocinaste de más y tienes congeladas, haremos una variante con un potente sabor.

Esto es re fácil, lo hacemos con sobras de la heladera. Aprende la técnica y le creas variantes.

Esta es una receta de conveniencia, cuando compramos el pollo apartamos las partes pequeñas o los menudos del pollo, agrupándolas hasta lograr una cantidad suficiente de 1 kilo o kilo y medio. Guardaremos las patas, alas, pescuezo, molleja y costillas del pollo en una bolsa en el congelador.

Una clásica carne estofada, más jugosa si, para armonizar perfectamente con los espaguetis. La Papa y zanahoria, le viene perfecto, pues si lo recuerdas son ingredientes de una buena boloñesa. Esta vez incorporaremos un vino blanco dulce, para hacerle el balance a la pasta de tomate, algo ácida, que ocuparemos.

Vamos a darle varios giros a esta receta que es un clásico de la cocina italiana. Realizaremos varias técnicas que nos permitiran realzar sabores, y haremos las capas con más salsa que carne, lo que permitirá una cocción más acentuada en horno de la pasta, creando mayor volumen de capas (6 a 7 capas) de pasta de rellenos más tenues. Esto lo aprendí de viendo a un chef italiano tradicionalista, entendamos que para ellos la pasta es lo vital, es la estrella, la carnes y salsa son el maquillaje. Mis lasañas tradicionales suelen ser de menos capas (4 a 5) de pasta con mucha carne y mucho queso en todos los rellenos. No utilizaré salsa blanca o bechamel, este chef la omite y yo comparto su decisión, la siento redundante.

Una que nunca falla para las tardes frías, consistente y deliciosa, viene bien con pan de corteza y una rociada de queso parmesano al gusto.

Esta es una receta que desarrollé combinando técnicas que observé con el propósito de potenciar sabores, y lograr aprovechar los tiempos de cada ingrediente.

Esta es una receta que me vino a la cabeza, buscando causar un efecto de pasta amalgamada con queso mozzarella y abundante carne; yo diría que es mitad carne y mitad pasta. El resultado fue glorioso, es una plato que se presenta muy integrado por los hilos del queso, pero a la vez suelto en el paladar, por la carne con abundante tomate concentrado. Debo aclarar que esta salsa fue un capricho de mi parte, requiere mucho trabajo y horas de dedicación, que en mi caso son un deleite para mi.

Este plato es poderoso en sabor, con mucho carácter, pero a la vez no es agresivo. La Gallina criolla toma preponderancia en la identidad del plato, el tomate le brinda una base conductora y amónica par consolidar e integrar la pasta. Tenía 200 gramos de cada pasta, y me dije ¿porqué no? Se verá interesante este mix, más si logró que sea un plato de bol. Luego vi un baguette francés, que nos quedó de una reunión anterior y claro que aproveche que estaba duro, lo corté y al sartén con aceite de oliva a fuego medio bajo. Ahora bien es un plato muy trabajoso, son muchos pasos y es para apasionados de la cocina.

Fácil y rica!