Se enciende el horno a 180ºC con calor arriba y abajo, o si es con gas a fuego moderado. Mientras se calienta vamos a empezar la elaboración de nuestro bizcocho.
Se rompen los huevos de uno en uno en un cuenco pequeño y luego se pasa en un cuenco más grande donde se van a batir bien con una varrillas de mano o bien con una batidora eléctrica.

Primero se van a batir 2 minutos y luego se le añade el azúcar. Se sigue batiendo hasta que doblen su volumen y se ponen blancos.
A continuación se le añade el aceite, la vainilla y la ralladura de limón. Se baten un poco para incorporar bien los ingredientes.

A la harina de maiz se le añade la levadura química y se mezcla bien. A continuación se va agregando a la mezcla anterior. Si se usa una batidora electrica, primero incorporar un poco la harina sin encendarla para que la harina no salga volando. Luego se pone en marcha y se bate hasta que la harina de maiz se ha incorporado bien. Se separa un cuarto de la masa en otro recipiente para añadirle el cacao.

Se mezcla hasta que esté bien incorporada.
Se prepara el molde untarlo con un poco de aceite, yo he usado un molde de silicona y le he pulverizado un poco de aceite de oliva.
Las dimensiones de mi molde son de 20 cm de diametro X 5 cm de alto. Pero podéis usar rectangular o el que tengáis en casa.
Se añade la mezcla blanca en el molde y luego por encima se le echa la mezcla con cacao.

Se extiende bien por toda la superficie con la ayuda de una espatula pastelera o bien con una cuchara.
Se introduce al horno para 30-40 minutos dependiendo de cada horno. Después de 30 minutos se puede hacer la prueba con un palillo. Si sale seco significa que ya está listo, si no pues, se deja un poco más.

Una vez sacado del horno se deja enfríar en el molde unos 5 minutos y luego se saca en un plato. Listo para disfrutarlo junto con la familia sin miedo al gluten. Si prefieren la receta video podéis pinchar en el siguiente enlace: https://youtu.be/vbLWTX6Lp1M