Cuando el pimiento y la cebolla empiecen a estar listos añadimos el calabacín y el puerro, removemos y dejamos que se cocinen unos minutos.

Si usas tomate frito, añádelo junto al atún y dejar cocinar unos minutos. En cambio, si usas tomate natural, tritúralo y deja que se cocine junto a la mezcla de verduras hasta que vaya reduciendo. Después incorporamos el atún y dejamos que reduzca un poco más. Reservamos el relleno.

Embadurnamos una bandeja con mantequilla o aceite para evitar que se pegue la pasta. Con cuidado vamos rellenando y enrollando los canelones.

Preparamos la bechamel con aceite, harina y leche. Unas 3-4 cucharadas de aceite y 2-3 de harina. Dejamos que la harina de impregne bien en el aceite antes de comenzar a echar la leche. Removemos bien para evitar los grumos. Añadimos sal y pimienta. Cuando la bechamel tenga la textura que queramos (a algunos les gusta más espesa que a otros) la vertemos sobre nuestra bandeja de canelones.

Pre-calentamos el horno a unos 180°. Cubrimos la bandeja con una capa de queso rallado (al gusto) y colocamos la bandeja en el horno con calor arriba y abajo. Horneamos unos 20 minutos. Yo los últimos 5 minutos lo pongo a gratinar.

Dejamos que se enfríe un poco y listo para disfrutar!