En una olla con abundante agua y sal ponemos a hervir durante 45´ los caracoles. Al agua añadiremos una hoja de laurel, un par de dientes de ajo, unas ramas de perejil y una cebolla. Reservamos. (Este método es para los caracoles congelados, como los que utilizo habitualmente, los vivos tienen otro tipo de cocción).

En una cazuela pochamos la cebolla en juliana y el ajo, cuando la cebolla esté transparente añadimos el chorizo cortadito a rodajas, la butifarra sin piel y desmenuzada y los taquitos de carne de cerdo, salpimentamos y añadimos la guindilla ; lo sofreímos todo. Cuando esté listo incorporamos la copita de vino, dejamos reducir y a continuación añadimos el tomate rallado. Cocinamos a fuego lento durante 20'.

Por último añadimos los caracoles a nuestra salsa y dejamos unos 15´a fuego lento, para que los ingredientes impregnen los caracoles. Siempre es mejor hacer este plato de un día para otro; el caracol de por si es soso y así va cogiendo el sabor de la salsa. Servir. Bon appétit!!