En primer lugar, pelamos la cebolla, la patata, la zanahoria y vaciamos de semillas los pimientos. Los calabacines y el tomate, los enjuagamos bien y los dejamos enteros. A continuación, lo ponemos todo en una olla, junto con los tres dientes de ajos enteros con la piel y la ramita de romero fresco.

A continuación, cubrimos solo por encima de los ingredientes, le ponemos sal al gusto y lo ponemos en el fuego.

Tapamos y dejamos cocinar durante veinte y cinco minutos.

Mientras tanto, enjuagamos los muslos en agua, el zumo del medio limón y un poco de sal.

Cuando comience a hervir el agua de la olla, bajamos el fuego y dejamos que se vayan haciendo las verduras.

Mientras tanto, troceamos los muslos y los ponemos en un bol.

A continuación, le añadimos la cucharilla de perejil deshidratado, la media de tomillo deshidratado y sal.

Mezclamos bien con una cuchara y reservamos en el frigorífico.

Pasados los veinte y cinco minutos, retiramos las verduras y dejamos tibiar unos cinco minutos.

A continuación, cogemos el brazo batidor y trituramos en la misma olla hasta que quede todo bien triturado.

Cogemos un colador grande de rejilla fina, lo ponemos en la olla previamente enjuagada y con la ayuda de un cucharón, apretamos para aprovechar el máximo del caldo y solo quede las impurezas.

A continuación, volvemos a poner la olla en el fuego, y le añadimos los trozos pequeños de muslos.

Le añadimos la mantequilla, le picamos pimienta de cuatro colores, rectificamos de Sal, removemos un poco y dejamos cocinar dieciocho minutos y listo.