Picamos los ajos y los ponemos a dorar en una sartén con un poco de aceite. Mientras en un bol donde nos pueda coger toda la carne, batimos los huevos. Los ajos, que ya estarán dorados, los reservamos. Añadimos al bol la sal, el perejil en abundancia y toda carne. Añadimos el pan rallado. Lo mezclamos bien con las manos. Después añadimos los ajos picados doraditos y volvemos a mezclar bien (se hace así para que los ajos no estén muy calientes al mezclarlos con la masa y se cueza el huevo)

Freidora a 160 grados. En un plato ponemos las dos cucharadas de harina. Hacemos 5 bolas de la masa del tamaño de una nuez con las manos y las pasamos por la harina. Una vez listas las freímos durante 3 minutos y mientras hacemos otras 5 bolitas y así hasta terminar toda la masa. Cuando están todas fritas, se ponen en la cazuela con el caldo de pollo y se cuecen durante 20 a 30 minutos dependiendo del tamaño. Ya están. Se pueden tomar en plato hondo con el caldo, o servirlas con la salsa.

Cortamos la cebolla en rodajas y la zanahoria, y la pochamos en una sartén a fuego medio con un poco de aceite y un pellizco de sal. Cortamos el pimiento en rodajas finas y también lo ponemos en la sartén. Mientras pelamos el tomate y lo troceamos. Cuando esté !a cebolla suave, ponemos también el tomate, junto con tomillo en abundancia y un poco de pimienta, y lo dejamos a fuego medio hasta que se haga. Se nota porque los trozos de tomate se empiezan a deshacer.

Mientras se hace el sofrito, calentamos el vaso de agua y le echamos una cucharadita de Bovril y removemos hasta que se disuelve. Vertemos toda la sartén en un vaso de la turmix. Echamos también una de las albóndigas que se estaban cociendo y el agua con el Bovril. Lo pasamos por la turmix. Ahora, en la sartén ponemos 1 cucharada de aceite a fuego fuerte. Cuando esté caliente, echamos la cucharadita de harina y removemos durante 1 minuto que se tueste la harina. Rápido, apartamos del fuego.